El Sueño en la Mujer

08.03.2012 12:43

¡¡¡¡FELICIDADES A TODAS LAS MUJERES EN EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER!!!!

Estamos felices de inaugurar este blog en una fecha tan señalada como es “el día internacional de la mujer” y de hacerlo con un artículo que esperamos que os ayude a entender y afrontar mejor las diferencias que existen en vuestro sueño a lo largo del ciclo menstrual

El sueño en la mujer: influencia del ciclo menstrual sobre el sueño

Las mujeres somos más propensas a padecer trastornos del sueño que los hombres. ¿Sabía que tales diferencias se asocian a la acción de las hormonas sexuales? En efecto, nuestros patrones de sueño sufren cambios a lo largo del ciclo menstrual, embarazo y menopausia. Es un hecho que los cambios físicos y hormonales afectan la calidad del sueño y se ha demostrado que somos dos veces más propensas a sufrir insomnio.

Durante el ciclo menstrual

En las distintas fases de este periodo tienen lugar ciertos cambios en los patrones de sueño relacionados con las cantidades de estrógenos y progesterona presentes en cada momento del ciclo. Esta importante hormona, parece cumplir un papel favorecedor en la calidad y duración del sueño, protegiendo a las mujeres de las dificultades para dormir durante su etapa fértil, (excepto durante el periodo premenstrual, que cae bruscamente el nivel de esta hormona). Sin embargo, la llegada de la menopausia, aumenta significativamente el riesgo de sufrir insomnio, debido a la caída en los niveles de estrógenos. El embarazo, también es un momento de cambios en estas hormonas y en consecuencia en el sueño.

En el ciclo menstrual se producen dos fases:

Fase folicular (desde el día 1 al 13 del ciclo, es decir desde el fin de la menstruación hasta el inicio ovulación): Al final de este periodo se produce un gran aumento de la secreción de estrógenos y fundamentalmente progesterona, que han demostrado tener propiedades somníferas, anestésicas y ansiolíticas. Lo que va a favorecer un sueño más profundo y prolongado.

Fase lútea (desde el día 14 al 28 del ciclo, es decir, desde la ovulación hasta la menstruación): En este periodo, inicialmente continúa la liberación de estrógenos, hasta que en los días previos a la menstruación, se produce una caída brusca de progesterona para facilitar el desprendimiento de las paredes del útero que será lo que provocará la mestruación. Los síntomas que produce esta brusca caída en la progesterona es lo que conocemos como síndrome premenstrual y va a producir importantes alteraciones en el sueño  en este periodo. Se ha detectado un aumento en la etapa del sueño ligero (fase 2), disminución en el sueño profundo (fase 3) y en el sueño REM (durante el que tienen lugar los sueños). Es decir, se refleja un importante deterioro en la eficiencia y calidad del sueño, así como en su duración y cantidad del mismo, ya que aparece un incremento en el tiempo necesario para conciliar el sueño y dificultad para despertar en la mañana.  Además, la calidad y cantidad de sueño se puede ver afectada negativamente por factores propios de la menstruación, como son el dolor menstrual o la pérdida de sangre (que asocia descenso de los niveles de hierro en la sangre predisponiendo a padecer un síndrome de piernas inquietas), provocan dificultades para el sueño.

¿Qué podemos hacer para disminuir los síntomas del síndrome premenstrual?

  • Aumentar la práctica de ejercicio físico que nos hará liberar endorfinas (reducen el dolor y las molestias) y descargar la adrenalina (aumentando los niveles de relajación y energía física)
  • Prestar atención a la dieta, eliminando grasas y alimentos difíciles de digerir o que produzcan gases, retención de líquidos o estrés. Aumentar infusiones, alimentos ricos en hierro, zumos, frutas.
  • Procurar tener horarios regulares de sueño, no hacer siesta o dormir a deshoras, salir de la cama y distraerse con cualquier actividad aburrida hasta que aparezca el sueño, que será el momento de volver a la cama, practicar una técnica de relajación, tratar de mantener una actitud positiva y distraerse de los síntomas.
  • Si los problemas de sueño interfieren con su desempeño diario, es recomendable que visiten al médico.

Próximamente, abordaremos el sueño en el embarazo, post parto y en la menopausia y os daremos recomendaciones para hacer frente a los problemas que pueden surgir con el sueño en estos momentos tan importantes en las vidas de todas las mujeres.

 

 

 

 

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